viernes, noviembre 17, 2006

SOLEDAD

Soledad es nombre de mujer, tal vez porque es la soledad, y es femenino o tal vez porque todo lo que es malo, según la Santa Iglesia Católica Apostólica Romana, está a la siniestra o es una mujer.

La soledad es paradójica, en un mundo globalizado donde todo está interconectado la soledad agobia al hombre nuevo, qué en una gran ciudad con millones de habitantes hay personas que están solas. Se mueren en soledad.

Pero la soledad de la que quiero hablar es otro variante de soledad, es la soledad de darte cuenta de que aquellos que creías tus amigos no lo son cuando los has necesitados durante ocho meses y veinte días, aquellos a los que tú has ayudado en sus momentos amargos, aquellos con los que has compartido risas y llantos, y esperas interminables días, no ya su visita, si no siquiera que suene el teléfono para preguntarte ¿qué tal? ¿cómo estás?. En esa soledad aparecen otros nuevos amigos, que te llaman, te dan ánimo, te escuchan, y entonces durante ese largo período que se ha parado tu vida ves que la soledad de una parte se transforma en compañía por la otra.

Pero a pesar de eso ha dolido. Duele darse cuenta de quien está a tu lado cuando crees que van a estar ellos. Ellos que vendrán en los días críticos a hacerse la fotografía, yo sentiré que vendrán a que lo vean los demás, y por eso lo que ahora siento por ellos se lo diré a la cara.

Los amigos ciertos son los probados en hechos. Anónimo.

DePiedra.